25 enero, 2008

¿Qué debo dar para vivir fuera del agua?

Adoro a las sirenas recién salidas del agua. A los delfines que las traen a las playas, para que los incautos caigamos rendidos ante su canto. Apenas sí saben andar en tierra firme, y parece que salten, jugando con los guijarros que arrastran las olas de la orilla. No saben donde están, ni les importa. Quizás busquen al príncipe azul que les bese antes del amanecer del tercer día. O quizás no. Quizás sólo busquen hacer el amor en la arena. Quizás sólo quieren ver el sol, hartas ya de tanta lluvia. A mi hace años que me da igual. Yo espero, y espero, cada noche, al abrigo de mi barco encallado y, cada mañana, sentado en la playa de Poniente, viendo el rojo Sol apareciendo en el horizonte, para escuchar a la misma sirena.

Cada día que pasa añoro más el mar, y cada día adoro más esa falda.

2 comentarios:

kykoche dijo...

"quizás sólo busquen hacer el amor sobre la arena"...eso se llama proyección :P

en fin, me alegro de ver que vuelves por tus fueros. Echaba de menos tus historias y tus reniegos.

:D

Chu Zing dijo...

XDDDDD...

El tema es que yo me echaba de menos...

Un abrazo!